jueves, 17 de marzo de 2011

Que detengan el tren


Dije una mañana:
que alguien pare esta máquina, porque quiero apearme.
Que detengan el tren, este no es mi viaje.

Pensé una mañana,
que era bueno hacer un alto en el camino,
pararme a luchar y cambiar el destino.

Decidí esa mañana,
que este mundo no es mio.
Que no es de nadie, y tampoco de ninguno.

Sabía esa mañana,
que seguirán soñando las rosas un nuevo amanecer,
que seguirá el río buscando ese mar para perder.

Escribí aquella mañana,
 letras en la arena, aunque sé que se las llevará el agua,
que se las llevará el viento cuando vuelva.

Lloré una mañana,
al intentar atrapar el sol, y ver que se me escapaba.
Lo intentaré esta noche cuando venga la luna.

Soñé una mañana,
que era una flor de papel sobre la tumba de un soldado
que no quiso bajar del tren.

1 comentario:

  1. WOWWWWWWWWWWWWWWWWWWWWWWWW!!!!
    En 2 palabras: IM - PRESIONANTEEEEEEEEEE!!!!
    Se me ha erizado la piel...
    Una vez más... "the best"
    Bicooooossssssssssssss!!!!!

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