Últimamente, hablo mucho, o quizá demasiado sobre la condición humana: en el facebook, delante de un café, en cualquier tertulia sale a colación, incluso mi post de cegados por la egolatría barajaba la posibilidad de que todos fuésemos unos asesinos en potencia. Ray, mi colega bloguero, me comentaba, que a pesar de todo ello no debemos de perder la confianza en la condición humana, y mucho menos dejar de ser fieles a nuestras convicciones.
Hoy le agradezco, desde aquí, que me lo haya recordado.
A pesar de todos mis defectos, que son muchos y variados, intento vivir sin dañar a nadie; pero es obvio, que no lo consigo. Y hoy he aprendido, que a pesar de todos mis esfuerzos soy capaz de contrariar a los demás, incluso hasta el odio...
Hoy por la mañana caminando por la calle, me crucé con el padre de un compañero de mi hijo, y cuando me dispuse a saludarlo se bajó de la acera y me torció la cara con el ceño fruncido. Con esa cara, del que le apetecería cruzarte la cara, pero que no lo hace porque todavía le quedan algunos escrúpulos. En ese mismo instante supe la razón de su comportamiento. Intentaré explicaros lo que pasó sin daros demasiados datos porque hay niños de por medio, y ante todo debo de salvaguardar su intimidad. El caso es que, la semana pasada, mantuvimos una reunión escolar para tratar de solucionar el caso de un crío que tiene tantos problemas, que están afectando al discurrir normal de la clase. Desde la directiva nos informaban, que el Estado la única opción que da, para este niño de tan sólo 10 años, es internarlo en un centro donde si va a estar tratado por especialistas, pero que también va a estar rodeado de niños de 14 en adelante. El resto de los padres se mostraron encantados con la idea, pero yo que por desgracia, o por suerte he visitado alguno de esos centros, de repente sentí como los pelos se me ponían como escarpias. Alcé mi voz entre la algarabía, y dejé constancia, de que yo jamás apoyaría esa decisión. Apunté varias opciones, que por lo visto parecían inviables, y sólo minutos más tarde cuando la masa comenzaba a enfervorizarse, desde la directiva sólo un miembro se atrevió a decir en voz baja, que a él tampoco le agradaba la idea. Bien pues esta es la historia, y sigo manteniendo que esa no es la mejor opción....aunque sé también que todo lo que argumenté ha caído en saco roto y sólo ha servido para granjearme otro puñado de enemigos.
De todos modos, para mi desgracia, el día aún no había terminado. La tarde se preveía tranquila, incluso tenía una cita para tomar un café con una amiga. Pero claro, a veces, las cosas se tuercen inexplicadamente, y como en el efecto mariposa, una cosa lleva a la otra. Reconozco mi culpa, y la aceptó. Llegué tarde, y no creí importante avisarla porque en cinco minutos la vería y le explicaría lo que había ocurrido. Pero no tuve oportunidad, el mal estaba hecho, y no tuve opción a dar ninguna explicación.
No creáis que os cuento todo esto para que un aluvión de lectores venga corriendo a darme la razón. No, no lo hago por eso. Simplemente, intento mantenerme firme, no dejarme doblegar por opiniones ajenas, que igual son mejores que las mías, no voy a entrar a discutirlo. Pero es que no son las mías; no son mis valores, ni mis ideales, ni mis pensamientos...y a pesar de que no son las mejores del mundo, todas ellas conforman lo que soy. No penséis que es egoísmo, ni siquiera obcecación...si estuviese dispuesta a cambiar todo eso, si estuviese abierta a ceder en cuánto alguien se ofende, entonces ya no seré Fini. Si, tendré la misma imagen, pero la esencia de mi ser habrá muerto....y de momento no quiero que eso suceda.
Si algún día ocurre, eso, será otra historia.
Hay una cita q dice: nadie nos dijo q la vida fuese fácil, sólo hay q vivirla. Y todo ello conlleva un sinfín de tropiezos en el camino... nadie es perfecto y, como se suele decir, kien kiere ser nadie??? tenemos q aceptarnos y aceptar a los demás como son... ya sé q hay injusticias pero nada q no se resuelva hablando y si no es así, es q esa persona no es importante en tu vida. Tenemos q aprender de los errores y de los errores de los demás.
ResponderEliminarCreo q todos tus seguidores estarán conmigo en q nunca... repito, nunca, dejes tu esencia... dejes de ser kien eres.
Un saludo.
Al menos, esto ha servido, para que, por primera vez, comentes un post,jajajaja.
ResponderEliminarCoincido con Rosana en todo....la vida es un cumulo de sucesos que nos ponen a prueba a ver cuanto somos capaces de aguantar...
ResponderEliminarCon referente a los defectos??? todos tenemos defectos, nadie se salva y te lo dice uno que tiene una lista como la de la compra de grande ;) ajajajjajaj pero lo bueno es saber reconocerlos y si haces algo malo a alguien pedir disculpas a tiempo.
En lo referente al odio, tambien te voy dar otra igual que hizo Rosana que espero que te ayude...
El odio es un lastre, la vida es demasiado corta para vivirla siempre cabreado, no merece la pena...
La vida de felicidad en si no existe, solo pequeños momentos que nos alegran la lucha diaria que es la vida, pero lo divertido es intentar encontrar el mayor numero de momentos asi y poderlos disfrutar a tope, y espero que tanto tu como Rosana los encontreis, porque sois buenas mujeres y os lo mereceis.
Sin mas dilaciones me despido, me gustan tus publicaciones, muestras ser una persona que tiene mas de dos dedos de frente, cosa que abunda poco en este mundo ultimamente.
Un saludo y un abrazo muy fuerte a las dos, que encontreis ese mayor numero de momentos de felicidad que tiene la vida porque vida no hay mas que una y la hay que aprovechar.